¿Por qué hay casas de cal en España?

Cuando visitaste los pueblos de Andalucía o Extremadura, ¿no te preguntaste por qué hay tantas casas con fachadas de cal? Jamás podrías imaginarte el motivo, más allá de la escasez de dinero o los calurosos veranos, encalar las viviendas impedía que se propagasen epidemias.

¿Por qué hay casas de cal en España?

Pueblos de cal de Andalucía y Extremadura

Estos últimos meses hemos visto cómo nuestra vida se trastornaba por culpa de un virus. Un organismo microscópico capaz de cambiar hábitos, destrozar planes y sumergirnos en la absoluta ansiedad. No es la primera vez que una pandemia afecta a España, pero parece que andábamos escasos de memoria.

En Dolor y Gloria (2019), Almodóvar hace memoria y presenta a un director de cine que recuerda su niñez en una casa de cal en Paterna (un pueblo de Valencia). Las fachadas blancas encaladas son un icono de muchos pueblos españoles. Una película de luces y sombras, muy en la atmósfera de Pedro.

Basta con viajar a los pueblos de Andalucía y Extremadura para empezar a recordar el pasado.

Concéntrate en la fotografía que tomarías en estos lugares, ¿ves ahora el blanco de la cal?

En muchas localidades andaluzas y extremeñas se sigue usando la cal para las fachadas de sus edificios. Y al contrario de lo que puedas pensar, no se trata de una simple tradición centenaria.

¿Qué tiene que ver la cal con las epidemias?

La cal tiene más de 130 usos y siglos de antigüedad, siendo uno de los materiales de construcción más tradicionales. Quizá las propiedades más importantes son el fuerte poder antiséptico y el color blanco que se relaciona automáticamente con la pureza.

Olvera, uno de los pueblos de cal de Cádiz.
  • La cal se usaba para sellar sepulturas y que los enterramientos fuesen seguros, impidiendo que se contaminasen las aguas o se propagasen infecciones.
  • También se encalaban casas de zonas calurosas de España. Por ejemplo, Canarias o pueblos del Mediterráneo.
  • Los ancianos recuerdan a sus padres usando la cal para evitar el asma y otras enfermedades respiratorias.
  • Y yo, me voy a centrar en la historia de la cal menos conocida. ¿Sabías que llegaron a decir que este material blanco podría frenar una peste?

Cuando España empezó a encalar los edificios…

En el siglo XVIII, encalar las casas y edificios públicos se volvió un hábito. Los ilustrados que aconsejaban al rey Carlos III le informaron de sus enormes beneficios para evitar las enfermedades.

España había sufrido varias epidemias que arrasaron con familias enteras y tenían que protegerse de las que vendían: la fiebre amarilla, el cólera, el tifus, la Gripe Española… hasta el coronavirus del que tanto hablamos últimamente.

Aunque no había, ni hay en la actualidad, evidencias científicas que demuestren que la cal frena una epidemia, los españoles creyeron que este material podía destruir cualquier enfermedad. Y en ese momento, empezaron a trabajar las brochas sin descanso.

La Gripe Española mató entre 1918 y 1920 a más de 40 millones de personas en todo el mundo. Además de llevar mascarillas, muchas familias encalaron sus casas.

Hornos de cal de Extremadura

Como hemos adelantado, el rey Carlos III aprobó todos los proyectos de construcción que usarían principalmente la cal: hospitales, administraciones públicas, escuelas… Entonces, para atender a tal demanda, nacieron la industria y los hornos de cal de Extremadura.

Conseguir las toneladas de cal que se usaban en el sur de España y algunas regiones de Portugal no era sencillo. Necesitaban desarrollar una industria fuerte y nacional para ahorrar tiempo y dinero en el transporte. Cáceres se situó en el mapa político y económico gracias a este blanco material.

Cáceres creció durante la fiebre de la cal y ganó influencia política y económica en Madrid.

Los hornos de cal llegaron a dar trabajo a más de 3.000 obreros extremeños. Este oficio era tan popular que en el centro de Cáceres nos encontramos con la Calle Caleros en su honor.

Extremadura y la cal

Muchos constructores viajaban a Extremadura para comprar cal morena, que seguía un proceso artesanal y minucioso. Los obreros debían estar pendientes del horno durante tres días y se organizaban para vigilarlo las 24 horas. El hospital provincial de Cáceres (1956) fue construido con cal para proteger a los enfermos de las epidemias y otras enfermedades.

Andalucía y la cal

Los edificios con fachadas de cal de Andalucía no siempre fueron un reclamo turístico. Hubo un tiempo en el que los vecinos solo querían protegerse de las epidemias y cuidar a sus familias. Así lo recuerda Manuela Delgado de 66 años en El País:

“Se blanqueaba por las epidemias. Por mucho que nos hayamos modernizado, mira cómo la naturaleza dice hasta aquí llegó. Ya decían mis antepasados que la cal quita todos los microbios”.

Manuela Delgado vive en Medina Sidonia (Cádiz), un pueblo blanco en el que cada primavera los vecinos cogen la la espátula y encalan la fachada.

Por supuesto, los precios bajos de la cal o la escasez de pigmentos hicieron que muchos pueblos andaluces se tiñesen de blanco. Pero hoy, no vemos la pobreza o la enfermedad en los preciosos patios andaluces.

Tal vez esté cegada por mi abuelo, cordobés de nacimiento y gallego de adopción, que a pesar de haber vivido en decenas de sitios… nunca vio otra luz igual a la de Andalucía.

Y no, el buen hombre no se refería a las escasas horas de sol que tenemos en Galicia.

Pronto otras personas vieron un negocio. A partir de la década de 1950, se empezaron a promover los pueblos de cal de Andalucía para ir de vacaciones. La radio y los programas de televisión no paraban de hablar de todos los sitios que podías conocer sin salir de España.

Algunos solo pensaban en los billetes, pero el turismo es mucho más. Olvidamos la parte triste, que durante un tiempo la cal se usó para evitar epidemias y tapar miseria, y le dimos un nuevo significado a los pueblos blancos del sur de España.

A fin de cuentas, incluso algo tan terrible como la enfermedad se puede transformar en luz. Y cuando se te olvide, date una vuelta por los pueblos encalados de Andalucía y Extremadura.


Pocos sabíamos realmente por qué hay casas de cal en España, pero para mí lo mejor es comprobar que ninguna pandemia ha podido eliminar la alegría que se respira en los pueblos de Andalucía o Extremadura. El olor a comida casera, el calor de las tardes de verano y las risas entre amigos han borrado cualquier peste aunque haya quedado el blanco de las fachadas.

Y tú, ¿has pensado a dónde vas a ir cuando termine la cuarentena del coronavirus? ¿Quizá un rincón de Andalucía o Extremadura?

Últimas entradas de Sen Enderezo

3 Comments on “¿Por qué hay casas de cal en España?”

  1. Que ganas de conocer esos pueblos de casas de cal!, aunque reconozco que el dato de las funciones de tal elemento contra las enfermedades, lo tenía por completo desconocido. Abrazos desde México!

    Me gusta

    • Hola,

      Antes de nada, muchas gracias por comentar en el blog y dejarnos tu opinión sobre los pueblos de cal. La verdad es que después de esta epidemia de coronavirus tengo muchos planes en mente, entre ellos, moverme por Andalucía y Extremadura para volver a ver este blanco tan especial. El origen de esta tradición no es muy esperanzador, yo tampoco sabía el uso que se le dio a la cal al principio, pero me gusta pensar que hoy solo nos hemos quedado con lo bueno.

      Y en México, ¿tenéis alguna ciudad o pueblo que se conozca por un color en particular? Lo cierto es que si pienso en el blanco, me vienen a la cabeza muchos lugares del sur de España o las islas, tanto Canarias como Baleares, pero no sé si en México ocurre lo mismo. Si es así, me encantaría saber más y tomar nota porque pienso ir (todavía no conozco tu país, ¿te lo puedes creer?).

      ¡Te mando un fuerte abrazo desde Bucarest, mi actual localización!
      Laura

      Le gusta a 1 persona

      • Hola linda! pues mira, en México siempre serás bienvenida, yo soy del norte del país, de Chihuahua, una tierra rodeada de cerros, vivimos entre la sierra (el bosque en todo su esplendor) y el desierto. Si te interesa lo colorido, historico y colonial, te recomiendo Guanajuato, en mi otro blog escribí sobre una visita que hice y la foto de cabecera yo la tome:

        https://aubescrit.wordpress.com/2019/05/16/regresando-a-guanajuato/

        Guanajuato es una mezcla de color, historia y mucho encanto, y tiene una fuerte influencia española!, es el sitio más bonito en el que he estado y me encanta. Pero además tenemos muchos otros lugares, como Sonora, donde el mar y el desierto se encuentran y hacen una fusión perfecta. Tenemos desde luego el caribe mexicano, con sus aguas turquesas, de ahí te recomiendo Bacalar, una laguna famosa por las siete tonalidades de azul en sus aguas. México también tiene mucho que mostrarle al mundo. Te cuento que yo para octubre tengo pagado un viaje a Sevilla, aunque claro, el ir ahora se ve complicado por la pandemia, pero igual me aocnsejaron aun no cancelar el viaje y la aerolinea aun no me lo permite porque falta tiempo, si no se puede pienso moverlo para marzo, pero quiero concoer Sevilla, Cadiz y andar un poco por los pueblos blancos de tu tierra. Abrazos!!

        Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: